Inercia de pensamiento y emoción
Inercia de pensamiento y emoción
Cuando se evidencia la fuerza hipnótica de la inercia del pensamiento y la emoción solo queda compasión. La pretensión del reconocimiento de Ser, y la consecuente aceptación de lo que Es, para subsanar el sufrimiento de la inercia del pensamiento y emoción de la identificación, solo es una posibilidad abierta, que “fructifica” con independencia de autorías, formalismos, o tiempos.
La peculiaridad de esta posibilidad abierta, rompe todos los esquemas de los modos, disciplinas y otras estructuras, sobre cualquier ámbito de los conocimientos. Todas las posibles indicaciones pueden parecer como lanzar semillas al viento. No obstante lanzar semillas forma parte de esta posibilidad abierta.
La sinceridad, la seriedad, la pasión e insistencia por la autenticidad, son indicativos básicos, pero continúan siendo abiertos a la posibilidad. La singularidad del reconocimiento de Ser, es una paradoja mental, por su extremada sencillez y su impersonalidad. La total aceptación como fundamento de paz, incluye todo contraste y toda intensidad, pues la aceptación es un dejar ser, lo que Es.
La vivencia no dual, no es solo intelectual, o de amor intenso por Ser. Es realmente ser lo que Es. La simultaneidad de presenciación siendo, sin saber y sabiendo, es lo que Es.
El dolor o sufrimiento es una experiencia de vida
El dolor o sufrimiento es una experiencia de vida, que desde el reconocimiento de Ser integrado en el diario vivir, relativiza el dolor o sufrimiento en su justa medida, que no es más que lo que es, sin implicación egoísta.
Quien sabe nada…Lo que es, irrefutablemente Es, lo que no es, solo tiene cabida como exposición, pues su misma exposición, Es.
El todo es mentira y todo es verdad, Es. El solo hay una sola realidad omniabarcante y trascendente simultáneamente, Es. La noción instantánea de ser, Es. Ser, conciencia, existencia, Es.
La negación por olvido, indica, Es. La nada, Es. Es, sin “ser”, Es. Lo que no Es, no puede Ser.
[wp-rss-aggregator limit=”5″]